Andévalo profundo, parte 1.
El invierno está en toda su plenitud, amaneció el día con 4 grados, además hoy es algo especial ☺️ (jiggle jiggle - duke & jones)
Me abrigué todo lo buenamente que pude y saqué al bicho de la cuadra, además es literal jejeje... porque donde duerme en otra época fue una.
El Sol apetecía bastante, pero por lo que se veía en el horizonte habría niebla por la zona, así que se me ocurrió ir a un lugar alto para hacer unas fotos, además no debería ir muy lejos por los planes. No lo pensé más, me monté en el bicho y me piré.
La ruta prometía ... frio, niebla y sol, ❄️☀️🌫 qué más se puede pedir!?.Cogí dirección Alosno y comencé a meterme en la espesura, me dio pena porque no suelo ir rápido cuando voy solo más que nada por disfrutar de la vida contemplativa y la niebla no ayuda. Aún así, visto con tus ojos puede ser tan bonito como se desee, y eso me pareció. Además tendría una excusa perfecta para volver hacer la ruta nuevo y observar mejor el paisaje en todo su esplendor 😄 (Long night - Edie Vedder)
Pasé por Alosno y seguí dirección La Puebla de Guzmán por una carretera secundaria muy apañá, no es la que se suele coger desde para ir allí, pero el plan del día es hacer nuevas rutas.
A medida que me iba acercando la niebla se hace más espesa y en cierta manera tiene su encanto, así que paré un momento para hacer unas fotos.... para así, mi querido y "joven" lector, entiendas mejor dónde me metía con el bicho.
El bicho en la espesura...
Llegué a la Puebla con un buen ritmo, la carretera está bastante bien. Era temprano, sobre las 9.30 más o menos y pude ver que el rastro lo montan los sábado, pero aún estaban liado con los tenderetes. En la avenida hay varios bares que estaban abiertos pero no era mi intención desayunar tan pronto, así que me dirigí a mi primera parada de rigor, la Ermita de la Virgen de la Peña. Un lugar precioso al que no había ido antes en moto y la cuesta que sube hasta allí arriba prometía, aunque corta será divertida.
Mientras lo hacía en mi mente se iba esbozando un paisaje con vistas de todo el Andévalo lleno se nubes y quería verlo ya, aquello me emocionaba y fue tal cual imaginé... a medida que iba cogiendo curvas y subía la niebla iba desapareciendo e iba quedando por debajo de aquel peñasco, la panorámica del Andévalo se iba haciendo más clara bajo las nubes a la vez que avanzaba.
Cuando llegué me extrañó ver tanto coche, habría alguna montería por la zona, solo se ven 4x4 enganchados con carros llenos de faruláis ladrando y deseando salir. Pasé de largo y paré tan rápido como pude para ir directo al mirador, no veía el momento de llegar a la puerta de la ermita, echar la pata de cabra al bicho y tirar unas cuantas fotos. Realmente mereció la pena ☺️, fue tal cual esperaba (imitation of life - REM), aquí os las dejo unas cuantas.
Estuve allí un ratito haciendo la fotosíntesis... se agradecía el solito de la mañana y el calor que dejaba en la chaqueta después de un rato…. es un gustazo. Si que hubiera sido buena idea traer un termo con cafe para desayunar allí arriba, me lo apunto para la próxima. 🤔
Después de tan hermoso espectáculo me subí de nuevo al bicho y lo hice rugir mientras bajaba, estaba a tope... 🤛💨 (La mision - Ennio Morricone)
Íbamos derecho a carreteras inexploradas, algo por lo que disfrutar y más si son secundarias. Quería navegar sin perder detalle y aunque me lo puso difícil la niebla, algo se podía.
Me dirigía a mi siguiente destino con la intención de llenar el buche, ya me lo iba pidiendo el cuerpo. En el primer cruce me desvié a la derecha dirección Cabezas Rubias. Disfrutamos aquella carretera, pequeña como la de las bodegas, con algo más de baches pero sin agujeros, cosa que se agradece de esta manera podía ir mirando más tiempo las encinas y alcornoques que al suelo.
Por allí se ven todo el tipo de animales autóctonos que dan por la zona: ovejas, caballos, conejos, cerdos... hasta un mastín que echo a correr detrás mía 🐕... Ya se encargó el bicho de rugirle para espantarlo jejeje 🤛🤛💨💨 Pasamos por varios barrancos en los que corría muchísima agua debido a las lluvias de la semana pasada, lo que me hizo parar a mirar algunos, pero con cuidado... el ruido del agua siempre es tranquilizante, además con el bicho en silencio se aprecia aún más. Al ser la única circulación algún que otro ciclista todo parecía más impresionante y relajado... te dejas llevar (Nora Jones & Anoushka)
Esta carretera nos lleva hasta Cabeza Rubias, quedando un poco antes y teniendo que incorporarse en un cruce a la nacional. Tras hacerlo un poco más adelante nos encontramos con la cuesta que baja al pueblo e hicimos la siguiente parada de rigor... con una buena tostada con aceite, tomate y jamón acompañado de un café bien caliente 🤤…. Así da gusto hacer rutas.
Paré en la plaza que transcurre junto la carretera, conocía el lugar por el trabajo, además sus camareras son muy amables 👌. Me fijé que estaban con un gatito pequeño blanco con una mancha negra en un ojo, estaría esperando que le echaran algo. Aquel momento evocó en mi mente la visión de los dos gandules de los míos que ni salieron a despedirme cuando abrí la puerta del garaje esta mañana... malditos desagradecidos 😡 ni un maldito maullido, cosas de mininos... (Diazepan - Leiva y Natala Lafuorcade)
Pagué y me dispuse a salir con la barriga llena y el alma satisfecha, un 10. El día se iba abriendo y en mis siguientes destinos solo tendría una parada más, ya iba de paso, lento pero seguro. Cogí dirección Santa Barbara de Casa. Mientras, las nubes poco a poco las iban levantando haciendo que las vistas fueran más agradables, paré de nuevo con cuidado en una recta para hacer unas fotos.
Pasé de largo por Santa Barbara y ahora tocaba Paymogo, la carretera hacia allí están muy bien, se ven venir las curvas y da gusto cogerlas. El paisaje del Andévalo en estas fechas es muy bonito, se ve todo completamente verde, contrapuesto al verano que además de calor la vegetación torna un tono amarillo, que aun teniendo su encanto no es tan bonito como ahora al verlo lleno de amapolas y con los barrancos llenos de agua.
Mi siguiente parada de rigor me llevaba a pasar de nuevo por la Puebla, solo que esta vez me pillaba de paso y debía coger el desvío hacia las Herrerías, una aldea minera de la Puebla. La carretera que lleva allá está bien, pero el tramo que va desde la aldea dirección a El Granado, que abarcará unos 6 km hay que tener muchísimo cuidado, me imagino que al no ser una carretera muy transitada está abandonada por parte de la administración y los agujeros son muuuy peligrosos. La pillé muy tranquilo para dar paso a mi siguiente destino, el Castillo de San Marcos en Sanlúcar de Guadiana.
Debía antes de llegar pasar por el Granado y esa carretera es muy bonita, además justo saliendo de allí, ya dirección Sanlúcar, hay unas cuantas de curvas mu apañadas 😛. Mi gran amigo en cartero las pilla que da gusto aunque vaya detrás de él, y como me dice... -Es lo único a lo que puedo aspirar, ver mi matricula-, Le aprieta bien el gachón a la japonesa. (ACDC - Thunderstruck)
Justo antes de llegar a Sanlúcar te desvías a la derecha para subir por un camino de tierra, con cuidado lo subí para llegar al Castillo de San Marcos. Ya había estado allí alguna que otra vez, así que sabía que merecía la pena contemplar un río que separa dos países con vistas a sus pueblos blancos y sus campanarios. Si te animas y eres de los riesgosos hasta puedes te tiras en tirolina y rejuvenecer una hora… aunque luego en un minuto, que es lo que tarda la barca en atravesar el Guadiana, vuelvas a ser otra vez un viejo 🤪. (Ether way - Wilco)
Aquel lugar es precioso y el pueblo de Sanlucar no se queda atrás, a veces tiro allá por la tarde para ver el atardecer mientras tomo un café junto al río. 🌄
Salí del mirador después de otro momento de contemplación y bajé la tremendísima cuesta del 7% para pillar unas de las carreteras del lugar que más me gusta, la que va dirección a San Silvestre. También tiene unas curvitas bastantes apañadas, además por aquella zona puedes encontrarte venados en mitad de la carretera en época de la berrea, así que cuidado 🦌, podrías pasar justo a su lado sin siquiera inmutarse.
Llegué a San Silvestre, ya solo me quedaba Villanueva de los Castillejos para llegar a casa. Aquel tramo de carretera es algo aburrida, solo vale para probar la velocidad de el bicho, una recta larguísima para dar gas a tope 🤛💨. Pero soy muy responsable y no supero los limites... 😏
Ya sabía que se terminaba mi ruta 😔, pero igualmente la disfruté y aunque se hizo corta fue una buena escapada.
Tenía algo de ganas de llegar, porque como comenté es un día especial, son fiestas en el pueblo y está mi hermano… así que toca día de parranda. Llegué a Villanueva de los Castillejos y solo quedaba el ultimo tirón que me llevaría guardar a el bicho en su cuadra, una carretera con unas curvas que se casi se de memoria, la emoción estaba servida. Se veía de lejos los cohetes llegando a la villa, me esperaban un par de cervezas bien frías🍻.
Y aquí acabó esta ruta, llena del encantó del Andévalo con sus paisajes y curvas, la cual recomiendo ya que además de ser bonita se hace rápida. Perfecta para esos días que uno quiere quitarse el gusanillo.
Comentarios
Publicar un comentario